28 misioneros de diferentes países y regiones de Brasil comenzaron el 24 de julio el Curso sobre la Realidad Amazónica, organizado por la Facultad Católica del Amazonas, en colaboración con la CNBB Norte 1, la Comisión Episcopal para la Amazonía y en comunión con la REPAM (Red Eclesial Panamazónica), que hasta el 5 de agosto tiene como objetivo «formar agentes de evangelización al servicio de la vida en estas tierras y aguas».
Por Luis Miguel Modino
El curso responde al deseo expresado por los obispos de la Amazonía en 2013, «de invertir en la formación de sacerdotes y hermanos y hermanas de vida consagrada -autóctonos y los que vienen de fuera- para que sean despojados, sencillos, no busquen la autopromoción, que sean misioneros y vivan en mayor armonía y contacto con las comunidades y sepan trabajar en equipo con los laicos, evitando el centralismo, la clericalización y el autoritarismo». Por eso, el curso «pretende ser ese espacio formativo de acogida, reflexión y aprendizaje para el servicio misionero en este terreno y en estas aguas«.
Los participantes del curso, siguiendo una metodología participativa, recibirán a lo largo de dos semanas «un conjunto de informaciones más sistematizadas sobre la propia región amazónica, centrando su reflexión en lo humano, el medio ambiente, la vida y la acción evangelizadora de la Iglesia». El curso pretende proporcionar una inmersión en el territorio, la historia y los temas contemporáneos de la realidad amazónica, reflexionando sobre las cuestiones pastorales emergentes para comprender la misión de la Iglesia como teología y prácticas misioneras ‘amazonizantes’, a partir de una metodología sinodal, decolonial e intercultural».
Los temas abordados tienen que ver con la Antropología, la realidad socio-político-económica de la Amazonía, los Movimientos Migratorios, la Historia de la Amazonía y el Cristianismo en la Amazonía, los Pueblos Indígenas, Ribereños y Urbanos, Biblia y Teología, Creación y Ecología, Misionología e Inculturación, Espiritualidad y Misión, Identidad Eclesial, el Encuentro de Santarém y el Sínodo para la Amazonía, los Grandes Desafíos Pastorales y la Red Eclesial Pan Amazónica. También se abordarán la Espiritualidad de la Ecología Integral y Laudato Si, la Juventud en la Amazonía, la Cuestión Indígena en la Amazonía y el trabajo de la Red Un Grito por la Vida.
Darse de cuenta de que se viene a una realidad nueva
El cardenal Leonardo Steiner, arzobispo de Manaos y presidente del Regional Norte1 de la CNBB, que presidió la Eucaristía de apertura, destacó que «nuestro Regional organiza todos los años este encuentro con los misioneros que vienen a nuestra región, y es un encuentro muy importante para abrir horizontes y para que las personas se den cuenta de que vienen a una realidad que no es la realidad del país de donde vinieron«. El cardenal dijo que «podemos proporcionarles dimensiones que puedan ayudar en la misión, a sentirse aún más misioneros, a sentirse aún más enviados, más llamados y llamadas a la misión».
Según el presidente del Regional Norte1 de la CNBB, «es importante recordar lo que decía el Documento de Santarém en 1972, retomado en el Documento 2022, encarnación y liberación, estas dos dimensiones muy importantes, estas dos directrices que ayudan a orientar nuestra actividad misionera, la misión de nuestra Iglesia que está en la Amazonía». El cardenal Steiner también insistió en que «estos misioneros deben ser capaces de realizar la recomendación del Papa Francisco de los cuatro sueños. Debemos tener en cuenta toda la realidad, la realidad social, la realidad eclesial, la realidad cultural, la realidad ambiental».
Aprender a escuchar
El arzobispo de Manaos subrayó que «es allí donde la Iglesia vive, es en esta casa común donde la Iglesia vive y da testimonio, es allí donde vive y anuncia el Evangelio, y todo necesita transformación, todo necesita liberación». Según el cardenal, «tal vez así se den cuenta de que es necesaria una inculturación, una Iglesia que busque inculturarse». Un largo camino que las iglesias de la Amazonía han recorrido y que esperamos que estos misioneros y misioneras también puedan recorrer y aprender. Si aprenden a escuchar, ya habrán recorrido la mitad del camino«.
La Hna. Antonia, de las Franciscanas Misioneras de la Madre del Divino Pastor, llegó de Mozambique para ser misionera en la diócesis de Roraima. Ella ve su participación en el Curso sobre la Realidad Amazónica como «poner los pies en la tierra, las manos en la masa y escuchar la realidad«. La religiosa insiste en que, frente a la actitud de algunos misioneros de llegar a los lugares para enseñar, ella dice que «aquí no es enseñar, es aprender del diferente, y con el diferente intentar hacer vida con la sensibilidad del pueblo amazónico».
Fuente: ADN Celam