En el Evangelio se le pregunta a Jesús por el Reino de Dios, «el Reino de Dios con el que soñamos, el Reino de Dios que nos ha alcanzado, el Reino de Dios que se ha convertido en nuestro horizonte, el Reino de Dios que se ha convertido en nuestra esperanza, el Reino de Dios que se ha convertido en nuestra vida, el Reino de Dios que es la razón de nuestro estar aquí, de intentar juntos siempre de nuevo, a través de todos los medios, hacer visible el Reino de Dios», afirmó el cardenal Leonardo Steiner durante el Comité Ampliado de la Red Eclesial Panamazónica que se celebra en Manaos los días 10 y 11 de noviembre de 2022.
Por Luis Miguel Modino
El purpurado destacó las palabras de Jesús en el Evangelio, donde dice que «el Reino de Dios no vendrá de forma ostentosa, no vendrá con la fuerza, con la violencia», denunciando el difícil momento que vive Brasil ante tanta violencia. El arzobispo de Manaos afirmó que «el Reino de Dios tiene una enorme suavidad, no es que sea frágil, tiene su propio vigor, el vigor de la semilla«. Insistió en que «la vida que está a punto de implosionar, la vida que está a punto de nacer nunca nace en la ostentación, nace lentamente, suavemente, diariamente, siempre, todos los días».
El arzobispo insistió en que «este Reino de Dios que soñamos, este Reino de Dios que nos motiva, este Reino de Dios que vino en la suavidad de la Cruz y la fuerza de la Resurrección, que nos motiva y nos hace buscar todos los medios para hacerlo visible». Recordó que «la REPAM, el CEAMA, nuestras comunidades, nuestras iglesias, nuestro estilo de vida, pero sobre todo lo que dice Jesús de nuestras relaciones, el Reino de Dios se hace visible a través de las relaciones«.
El Reino de Dios sólo ocurre con nuevas relaciones
El Cardenal de la Amazonía destacó que «el Reino de Dios sólo ocurre con nuevas relaciones, el Reino de Dios ocurre cuando nos abrimos realmente como hermanos y hermanas, en las diferencias, cuando nos respetamos profundamente. Como nos dice el Papa Francisco en Querida Amazonia, cuando soñamos sueños juntos, tenemos un solo sueño, de nuevas relaciones.» Desde ahí hizo un llamamiento para que «la REPAM, el CEAMA, nos ayuden a crear nuevas relaciones, a no tener nunca miedo, a no dar nunca un paso atrás cuando se trata de hacer visible el Reino de Dios».
El Reino de Dios se hace visible, afirmó el cardenal, «cuando existe esta armonía, cuando nuestros pueblos originarios comienzan a ser respetados, en su cultura, en su forma de ser, en su cosmovisión«, cuestionando «cómo nos ponemos como Iglesia al servicio, a qué pueblos escuchamos, cuando escuchamos y percibimos que las relaciones del Reino ya están presentes», y llamando a «ser testigos de Jesús, testigos del Reino».
El arzobispo de Manaos dijo que «si queremos tener un rostro amazónico, y el rostro amazónico es tan diverso, pero se colorea, dando un rostro único en sus diferencias, en sus diversidades, el mundo urbano, su vida cultural, su vida social, el medio ambiente, poco a poco da un rostro, tantos rostros, pero sólo se convierte en un verdadero rostro cuando se hace visible el Reino de Dios, que no es nuestro, que hemos ganado, que hemos recibido, y que recibimos gratuitamente, desde lo alto de la Cruz por la Resurrección».
Rito amazónico
El vicepresidente de la CEAMA se refirió al rito amazónico, una de las propuestas del Sínodo para la Amazonia, «que se está abriendo camino en las discusiones y reflexiones, pero hay que ir junto a los pueblos originarios para buscar sus expresiones de religiosidad«, algo que se está haciendo en varias regiones de la Amazonía, en Brasil y en otros países, donde «sabemos que hay una riqueza de religiosidad de nuestros pueblos», destacó.
El trabajo será realizado por dos investigadores que recogerán varias experiencias muy interesantes que existen, recordando lo vivida por el cardenal con el pueblo Xavante durante el tiempo que fue Obispo de la Prelatura de São Félix do Araguaia, con su propio rito de iniciación a la vida cristiana y la celebración de la Eucaristía, en su propia lengua, haciendo realidad lo que dice el Papa Francisco en Querida Amazonia, el Evangelio inculturado, no son ellos los que tienen que adaptarse a nuestra cultura.
Fuente: ADN Celam