La Catedral de Puyo, provincia de Pastaza en Ecuador, que funciona como sede del Vicariato Apostólico local celebró sus 50 años de fundación. La celebración se llevó a cabo con la celebración de un año jubilar. La ciudad de Puyo celebra también sus 123 años de fundación un 12 de mayo, fecha en que bendijeron el pasado jueves nuevos vitrales realizados por la artista Rosa Narea.
Por Vatican News
La Ciudad de Puyo en el Ecuador celebró un doble acontecimiento, sus 123 años de fundación de la ciudad y los 50 de cuando fue creada su Catedral. Los festejos comenzaron desde el año pasado, dando inicio a un año jubilar.
Año jubilar
En el aniversario de los 50 años desde cuando fue inaugurada la catedral, se llevó a cabo un año jubilar, lleno de festejos que comenzaron desde el 12 de mayo del año pasado.
Un 12 de mayo, pero de hace 123 años, se fundó la ciudad de Puyo. Según narra la historia del lugar, los fundadores, Fray Álvaro Valladares y un grupo de indígenas de Canelos, llegaron el 12 de mayo de 1899, al lugar donde hoy reside la ciudad, plantaron la cruz, celebraron la misa, y fundaron el nuevo pueblo, encomendándolo al amparo de la Virgen del Rosario de Pompeya, cuya imagen permanece al interior de la catedral.
El primer Obispo fue Mons. Alberto Zambrano Palacios, quien comenzó la construcción de la catedral en 1972, le siguieron Mons. Tomás Romero Gros, Mons. Frumencio Escudero Arenas y hoy Mons. Rafael Cob García, quienes han puesto su aporte para embellecer la catedral cada día.
Dijo Mons. Cob hace un año cuando anunciaba el inicio del año jubilar: “No podemos dejar pasar de largo este año jubilar, a pesar de la pandemia que siempre es un limitante, para que nuestro pueblo celebre con júbilo dentro de la historia de la fe de esta tierra de Pastaza, acontecimiento tan singular como es la inauguración y bendición de esta catedral que hoy admiramos con alegría y sano orgullo, como exponente y símbolo de la identidad cristiana de nuestro pueblo”.
El Vicariato Apostólico de Puyo celebró los 50 años de la bendición y consagración de su Catedral, concediendo la indulgencia especial para todos los fieles. Así lo explicó en el decreto jubilar que destaca la importancia de la catedral como madre de todas las parroquias en esta iglesia particular, según un informe del Celam.
En 1972 se construyó la catedral
En un mensaje Mons. Cob recordó que la construcción de la catedral llevó cuatro años. Pero ahora, dijo, a 50 años de aquel gran acontecimiento, vale la pena volver a poner la mirada sobre una catedral que pone su mirada a Nuestra Señora del Rosario de Pompeya. A ella también se le pide que interceda por el fin de la pandemia.
En 1972, al concluir los trabajos del templo, fue bendecido y consagrado por el primer obispo de Puyo, el dominico Mons. Alberto Zambrano. Mons. Cob recordó el jueves pasado, en la ceremonia de clausura del año jubilar, las palabras que dijera el primer obispo de Puyo al momento de bendecir la catedral: “esta catedral es el testimonio de la fe de un pueblo joven y creyente. La nueva catedral corona la abnegada labor de insignes misioneros que cruzando la impenetrable selva y sus ríos con el afán de llevar a Cristo predicando su evangelio a los pueblos más olvidados”.
Bendición nuevos vitrales en la Catedral
En su reflexión al momento de bendecir los nuevos vitrales de la catedral, el Vicario Mons. Cob afirmó que hay catedrales que catequizan y enseñan “con su belleza artística.. catedrales que se destacan en su belleza por sus esculturas, por sus pinturas y por sus vitrales”.
“Y esto es lo que en este día queremos resaltar, para que esas ventanas hablen a la gente, Iglesia viva, hay belleza en sus paredes en sus estatuas o imágenes en sus columnas y en sus ventanas como las que hoy podemos contemplar en nuestra catedral, además de dejar pasar la luz como el cristal, expresan un arte de luz y color que comunica un mensaje a nuestro corazón y a nuestra mente”.
Como gran regalo que inmortalice estas fechas del cincuentenario de nuestra catedral, hemos querido dejar esta huella con el gran regalo de sus bellos vitrales, dijo el prelado, el jueves pasado al concluir el año jubilar, vitrales construidos por la mano de “los artistas como Rosa Narea …. a la cual agradecemos su gran trabajo e inspiración para dejar plasmada la belleza del arte humano en estos vitrales”, señaló.
La Catedral goza de vitrales, en los que se pueden apreciar los rostros de santos universales, dijo Mons. Cob, que son vida y testimonio a seguir, como Santo Domingo: gran misionero, fueron los primeros misioneros que evangelizaron Ecuador; O el primer Santo ecuatorianos, el Santo hermano Miguel, ejemplo y modelo de maestros y catequistas; o San Francisco de Asís, dijo el prelado, patrono de la ecología y modelo de construir fraternidad, tan necesario para entender que en el planeta todo está interconectado, la exuberante vegetación de nuestra Amazonía con su fauna y con su flora; y por último, Mons. Cob recordó a la Beata Mercedes de Jesús Molina, primera misionera ecuatoriana ad-gentes que llego al Oriente de esta selva para trabajar con los más necesitados, y la Sagrada Familia, modelo de toda familia, modelo de amor y de paz en el hogar.
La reflexión de Mons. Cob concluyó con la invitación a la comunidad para que la celebración de las bodas de Oro de esta catedral sirva para renovar el espíritu personal y comunitario.
123 aniversario de la fundación de la ciudad de Puyo
El obispo Vicario Apostólico de Puyo, en su reflexión sobre este doble acontecimiento, expresó su alegra de poder celebrar con todo su esplendor dos fechas en un mismo día. El 12 de mayo de hace 123 años, el fraile dominico Alvaro valladares iniciaba la fundación de Puyo, y hace 50 años, el fraile dominico y prpimer obispo de Puyo, Mons. Alberto Zambrano bendijo y consagró su nueva catedral.
“Hoy regresamos a este lugar donde el fundador Fray Alvaro Valladares construyó la capilla de madera para celebrar la fe y religiosidad de un pueblo que nunca perdió la esperanza, sino al contrario que fortaleció su fe en ese Dios creador que le regaló este paradisiaco jardín de la Amazonia, que ha sido y es fuente de prosperidad, donde su flora y sus cascadas es atractivo para propios y extraños, potencial turístico para que todos podamos mostrar a los demás el referente de una Amazonia que es desafío para todo el mundo”.
Además, el obispo recordó su pasado viaje a la ONU y la OEA donde la Red Eclesial Amazónica mostró las heridas de “nuestra Amazonia a nivel continental, donde entregamos el informe para mostrar la necesidad que tiene la humanidad de preservar este pulmón de oxígeno y manantial del agua dulce de sus ríos, que hay que cuidar y proteger así como los derechos de los pueblos que la habitan y son vulnerados”, y reflexionó por último:
“Estamos en la Amazonia con los pies bien puestos en el suelo, pero los pies no pueden caminar, si no hay unos ojos que nos conduzcan con fe y esperanza a un cielo prometido y conquistado por el amor y la entrega sin ocaso. Que, en este mes de mayo, mes de primavera y mes de las madres, aprendamos del fundador, que encomendó este pueblo de Puyo y su fundación, a la Virgen Nuestra Señora de Pompeya nuestra patrona, porque sabe que todos necesitamos de una madre. Una madre que ama sin descanso, que nos ama y a quien amamos. Y el que ama en el amor allá descanso”
Fuente: VATICAN NEWS