44 jóvenes indígenas de los pueblos Ticuna, Kokama y Kanamari participaron, del 25 al 29 de junio, en el I Encuentro Vocacional Indígena 2023, realizado en la Parroquia San Francisco de Asís de Belém do Solimões, en la Diócesis de Alto Solimões, Amazonía brasileña. Son jóvenes de las comunidades de las parroquias de Benjamín Constant, Tabatinga y Belém do Solimões.
Por Luis Miguel Modino
El encuentro, que tuvo como tema: «Tupana cuca naca» (¡Dios te llama!), fue una oportunidad para participar en momentos de formación y testimonios sobre cada vocación: Matrimonio, Vida Laical, Vida Religiosa y Sacerdotal, pero también un encuentro con momentos de oración: Lectura Orante, Eucaristía, Rosario, Adoración, un tiempo para el trabajo pero también para la fraternidad y el ocio.
Los organizadores del encuentro destacaron la gran participación, así como la seriedad, alegría y generosidad de los jóvenes y el hecho de que al final del encuentro, cada vocación autóctona renovó sus compromisos.
Entre los compromisos asumidos, destacaron rezar personalmente todos los días y en comunidad todas las semanas, especialmente el Rosario y la celebración de la Palabra, rezar por la propia vocación y por la vocación de los demás. Junto a esto, ofrecer un servicio en su comunidad cada semana, en la catequesis, visita del diezmo, grupos de jóvenes, animación del rosario, visitas misioneras, entre otros. Por último, hablar de su vocación con personas con más experiencia: ministro de la Palabra, diácono, catequista, sacerdote, fraile, hermana.
Cada día nuestro corazón siente la llamada a ser feliz
Una de las vocaciones indígenas nacidas en la parroquia de Belém do Solimões es la de Hércules Vitorino, seminarista de la diócesis de Alto Solimões, que cursa el tercer año de Filosofía en el Seminario San José de Manaos. El indígena del pueblo ticuna define la vocación como «una mirada de Dios para formar un deseo de vida en Jesucristo«. Insiste en que «Dios siempre nos llama a ser la verdadera Iglesia de Cristo. Cada día nuestro corazón siente la llamada a ser feliz».
Una vocación que es un deseo de «hacer misión para mi pueblo», pero también de «gustar la vida de Jesucristo», algo que dice estar haciendo, «probar su vocación para formarse en la bondad». Dice sentirse llamado por Dios para su pueblo, «un caminito para ellos, soy una puerta para ellos», algo que ve en las palabras de Jesús. Una vocación que para el seminarista indígena es «una gran misión en la Amazonía, no tener miedo de hablar de Dios«, algo que va comprendiendo poco a poco.
Como seminarista indígena, se siente desafiado y llamado a formarse para ser un buen pastor para su pueblo, mirando a Jesús como el Camino, la Verdad y la Vida, lo que le lleva a no tener miedo de hablar de Dios y de la fe en Él, algo que ha ido aprendiendo poco a poco en la vivencia de su vocación.
Agradecimiento por este momento
Los participantes del encuentro agradecieron a todo el Equipo de Vocaciones Indígenas, a los Frailes Menores Capuchinos, a las Hermanas Misioneras de la Inmaculada, a las Hermanas Canónigas y al equipo que se encargó de la acogida y de las comidas.
Finalmente, los organizadores del I Encuentro Vocacional Indígena 2023 piden oraciones para que, por intercesión de María, Madre de las Vocaciones, el Espíritu del Señor ilumine y guíe las vocaciones de los hombres y mujeres de todo el mundo.
Fuente: ADN Celam