Falleció este domingo, 20 de junio de 2021, en el Hospital Unimed de Manaos, Mons. Alcimar Caldas Magalhães, obispo emérito de la Diócesis de Alto Solimões, en la triple frontera entre Brasil, Colombia y Perú. Según la diócesis, la causa de la muerte fue un paro cardíaco.
Por Luis Miguel Modino
Nacido el 2 de febrero de 1940 en la comunidad de Ourique, municipio de Benjamín Constant, estado de Amazonas, hijo de pequeños caucheros, fue ordenado sacerdote en 1967. Su primer destino fue como párroco de la Parroquia de San Pablo Apóstol en São Paulo de Olivença, en la entonces Prelatura de Alto Solimões, siendo elegido Consejero y Definidor de la Custodia de los Hermanos Capuchinos de la Amazonía en 1972.
Mons. Alcimar, que cumpliría 40 años de ordenación episcopal el próximo 25 de octubre, fue Obispo de la Diócesis de Carolina, estado de Maranhão durante 9 años, siendo transferido a la Prelatura de Alto Solimões el 18 de noviembre de 1990. Posteriormente, el 16 de febrero de 1992, la prelatura fue instituida como diócesis y Mons. Alcimar fue nombrado obispo diocesano, cargo que asumió hasta el 20 de mayo de 2015, cuando el Papa Francisco aceptó su renuncia canónica.
Una misión preocupada con la dimensión social
La misión de Mons. Alcimar en la diócesis de Alto Solimões, tierra que le vio nacer, estuvo siempre muy marcada por la dimensión social, ayudando a promover proyectos al servicio de mejores condiciones de vida para la población de las comunidades indígenas y ribereñas.
Su trabajo fue reconocido en numerosas ocasiones. En 1999 fue elegido Consejero del Estado de Amazonas para el Sector Primario, siendo condecorado por el Gobierno de Amazonas con la medalla Marechal Cándido Rondon; el 31 de agosto de 2008, recibió el título de Caballero de la Paz, por sus acciones a favor de la Vida y la Paz en la región del Alto Solimões y en otros lugares donde ha estado; en 2009, fue nominado para competir por el Premio Inmortal de Brasil, cuyo objetivo era elegir a seis brasileños con actividades en el área socioambiental y que tuvieran una importancia real, presentando beneficios y resultados demostrables para las comunidades, ciudades, estados o regiones en las que actúan.
La diócesis pide oraciones por el descanso eterno
En asociación con entidades extranjeras, gubernamentales, no gubernamentales y de la sociedad civil organizada, realizó varios proyectos en favor de los necesitados. La diócesis, que pide oraciones por el eterno descanso de su obispo emérito, ha mostrado su solidaridad con “su familia, la familia capuchina, los amigos y todos los que caminaron con él en esta nuestra diócesis en su misión como sacerdote y obispo entre nosotros”.
Todavía no se ha anunciado la fecha del velatorio y el entierro del obispo emérito de Alto Solimões, que deberá tener lugar en los próximos días en Tabatinga, sede de la diócesis.