Este martes 3 de mayo, a pesar del contexto de la pandemia que ha impedido que el informe sea presentado por los verdaderos guardianes de la naturaleza, los pueblos amazónicos. Sin embargo, la voz y todas las propuestas desarrolladas por los pueblos ha sido trasladado a la CIDH con el contenido del segundo Informe Regional de Vulneracion de Derechos Humanos de la Panamazonia, que refleja las necesidades y todas las presiones a las que están sujetos. El objetivo es canalizar las propuestas de este informe a cambios de políticas públicas y la inclusión a los proyectos de desarrollo con una consulta previa, libre e informada. No se puede desconocer el derecho a la autodeterminación de los derechos de los pueblos en estos tiempos actuales.
Para los amazónicos, la CIDH es una aliada donde la necesidades y urgencias deben encarnarse y dar vida al contenido de la Convención Interamericana de Derechos Humanos. Por ello, dentro de esta miranda de bioma y único territorio especialmente diferenciado, REPAM traslada la urgencia de trabajar otras formas diferentes de construir herramientas para la defensa de los derechos humanos en territorios indígenas por parte del Sistema Regional de DDHH que vayan más allá de las actuales y responda a la propia cultura del territorio.
REPAM Y CIDH tienen un convenio firmado desde el 2017, prorrogado el año pasado, y siguiendo sus líneas de trabajo, hemos acordado realizar la mayor difusión de los informes propios (libre determinación y pueblos indígenas en Amazonía); organizando eventos en conjunto con la participación de los verdaderos protagonistas, las comunidades indígenas.
De forma muy especial, la situación del pueblo yanomami y su brutal persecución ha sido una de las realidades que ante la CIDH hemos querido presentar desde nuestra Red.