El reconocido misionero franciscano y obispo de San Ramón deberá seguir una semana más de tratamiento. Desde el Vicariato refieren que se encuentra “animoso, contento y muy agradecido con los profesionales que han estado velando por su salud, pues son personas excepcionales”. Mons. Zerdín fue referido el 17 de julio desde Atalaya (Ucayali) hasta Lima, tras infectarse por coronavirus.
Por: Beatriz García – CAAAP
A su salida del Hospital Covid-19 de Ate-Vitarte el último domingo en la tarde, monseñor Gerardo Zerdín comentó a quienes le esperaban que, ahí dentro, donde cientos de personas luchan contra ese virus invisible, hay muchos “angelitos y angelitas que nos cuidan”. Uno de esos luchadores también ha sido él, pues ha permanecido ingresado en el nosocomio limeño durante más de dos semanas desde que el viernes 17 de julio tuviese que ser evacuado en vuelo de emergencia desde Atalaya, en Ucayali, donde habitualmente reside al interior de la Universidad Intercultural NOPOKI que impulsó años atrás.
“Está animoso y contento, todavía debe recuperarse completamente, pero ya en la casa continuará por una semana con tratamiento ambulatorio”, refiere el diácono Samuel Panés, secretario del Vicariato Apostólico de San Ramón. Una alegría por la salida del hospital que además, se produjo en una fecha muy importante para la congregación de los Franciscanos pues ayer, 2 de agosto, se celebró el día de Nuestra Señora de Los Ángeles y la Porciúncula. Y es que esa pequeña iglesia, en el municipio de Assis (Italia), es el lugar donde comenzó el movimiento franciscano.
“Monseñor ha visto la realidad de la enfermedad desde adentro de un hospital y, según dice, la realidad desde dentro es diferente a lo que se ve desde afuera a través del televisor”, comenta Panés. Mons. Gerardo Zerdín es el más veterano de los obispos de la Amazonía Peruana, pues lleva más de 40 años de servicio en la selva primero como misionero franciscano y, desde el 2002, como obispo del Vicariato de San Ramón que está integrado por la provincia de Oxapampa (Cerro de Pasco), las provincias de Chanchamayo y Satipo (en Junín) y la mayor parte de la provincia de Atalaya (en Ucayali). Es un reconocido defensor de los pueblos indígenas y, especialmente, de la cultura y la lengua pues conoce la oralidad y la gramática de varios idiomas indígenas como el shipibo-konibo, el asháninka y el ashéninka. Además, en los últimos años viene aprendiendo yine, yánesha y matsigenka. Fruto de esa pasión y compromiso es la creación del Programa Universitario NOPOKI donde cientos de jóvenes indígenas estudian en su propia lengua. También ha sido presidente del Centro Amazónico de Antropología y Aplicación Práctica (CAAAP).
Cabe recordar que monseñor Zerdín, a sus 70 años, es el segundo obispo de la Amazonía Peruana que padece y supera la enfermedad Covid-19, pues en el mes de abril monseñor Javier Travieso, obispo del Vicariato San José del Amazonas, también atravesó la enfermedad siendo dado de alta semanas después.